Cuentos Mandarinos termina con la Puerta de Brandenburgo de fondo, tras cinco años de entrega casi absoluta a la ciudad Berlín.
Huele a verano y soy una 25.000. Me conformo. FiN.
Blog about LOVE, PEOPLE and PLACES. Like Chakrasana, a long weekend, a trip…
Cuentos Mandarinos termina con la Puerta de Brandenburgo de fondo, tras cinco años de entrega casi absoluta a la ciudad Berlín.
Huele a verano y soy una 25.000. Me conformo. FiN.
Acabo de identificar la palabra confusión. Lo de quedarme sin trabajo y todo eso, ha sido un giro muy Berlín – por no decir una putada, vaya – pero es que esta ciudad es así. Tal cual.
Si nada me hubiera gustado más que poder compartir otro desenlace, un final tan abierto tampoco está mal, ¿si? Ahora tengo más experiencia. Y las ganas intactas. Y este blog. Glup!
When I believed that I got some stable position, I started to seek also for a true job.
It’s time to continue, definitely.
Contra todo pronóstico, me despidieron. Ocurrió poco antes de que termina mi periodo de prueba. A última hora de la jornada laboral, dos de mis colegas me reunieron en una de las salas de juntas para darle una patada a mi bonito trasero. ¡Zasca! Argüieron motivos estructurales, los muy embusteros. Fue una experiencia bastante desagradable.
Para una existencia curtida como la mía, este revés, inesperado pero cierto, me encabrona muchisisisimo, pero no me desestabiliza. Al contrario, reaviva las ganas que tengo de elevarme en Berlín, ¿si?
Foto: SIMON BÜRGEL
Corre otro año cargado de posibilidades y como siempre, las quiero aprovechar todas, ¿si?
Photo: FRANK GAMIZ
Während des Leiters liegt im Krankenhaus mit einem Herzinfart, habe ich eine Stelle als Legal Assistant gefunden. Extra! Extra! Ich fänge am Nikolaustag an!
Aunque me he llevado unos cuantos batacazos, este año también me ha traído cosas muy buenas, así pues el balance sigue siendo positivo. Huhu.
Ayer recibí una buena noticia. Después de 6 meses contratada a través de una empresa de trabajo temporal, voy a ser adquirida por mi empresa. Significa que me he convertido en auxiliar administrativo. ¡Yupiii! Me quedo por aquí de todas todas.
Photo: SIMON BÜRGEL
Aunque parezca increíble, seguimos en Berlín.